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El toque del quera.

 
Publicado en la revista PlanetaVino nº1, Junio/Julio 2005, sección: El Toque del Quera


Me dice el tipo este, el Proensa, que mi columna debe llamarse “El toque del quera” y como desconfío hasta de su sombra, miro en el D.R.A.E. y veo que dice: “ quera. (Del lat. carîes). 1. m. Hombre pesado y molesto”.

No sé qué querrá insinuar, porque yo soy una persona simpatiquísima y de lo más afable, pero en fin, si al menos me llamase misántropo ...

Lo cierto es que, a veces, cuando leo en el periódico que unos ilegítimos académicos, supuestos directivos de una trolera Academia de Gastronomía, han entregado los premios del inexistente y por tanto falso, Colegio de Críticos Gastronómicos y, a sabiendas de que se trata de una mentira premeditada, toda la Hermandad de Amantes de La Sopaboba, aplaude el acto y la Administración ni se molesta en detenerlos, pues sí, realmente me siento molesto, porque ya va siendo hora de denunciar tanta golfería.

También es cierto que, cuando a uno le despiden de un medio por ejercer honestamente el trabajo para el que ha sido contratado (Para saber de qué va la guerra, pinche en Culmen), simplemente porque el director comercial de una bodega que ha sido criticada por tomar el pelo a los consumidores, como es amigo de uno de los jefes del grupo editorial, pide la cabeza del crítico y el director se la concede, pues también me incomodo. Sobre todo cuando ves como un supuesto compañero, al enterarse de esto, en vez de defender la dignidad profesional, dedica un panegírico en su revista al mafiosillo causante del escándalo, quizás en agradecimiento a los millones que entre ambos habían sacado a la bodega para una esperpéntica campaña publicitaria.

Puede que me ofenda y se me retuerzan las tripas cuando un bodeguero me dice: “Mira, mientras pagaba la campaña de imagen, mi vino tenía un 90/100, cuando dije que ya no podía seguir con semejante sangría, me tiraron al 70/100. Sois unos gangsters.” Y es que tiene toda la razón, aunque no sé porqué nos lo suelen siempre decir precisamente a quienes no practicamos esas artes.

Tampoco me siento muy a gusto cuando cierta cuadrilla le dice a una empresa que ha contratado los servicios de otro compañero: “Dame a mí esa campaña porque yo estoy muy cerca de la Casa Real y te voy a mover tus productos donde esos muertos de hambre no pueden llegar”, más que nada porque, tanto esa, como cualquier otra institución, incluidas las grandes compañías públicas que editan sus propias revistas y guías, haciendo competencia desleal ya que no importan las perdidas, puesto que las mantenemos entre todos con nuestros impuestos, dan cancha a esos truhanes sin el menor concurso, haciéndolos cada día más poderosos, frente a quienes intentamos defender eso que se llama libre comercio.

Es cierto que me disgusta ver como los grandes medios fabrican de la nada a nuevos mega críticos, al estilo de los esperpénticos famosillos de Gran Hermano, en vez de contratar a cualquiera de los muchos excelentes profesionales que andan por ahí danzando (por supuesto que no me incluyo entre ellos), porque al final el consumidor se vuelve loco leyendo crónicas esquizofrénicas motivadas por misteriosas directrices que para nada obedecen a esa supuestamente calidad descrita.

En fin, que sí es verdad que a veces me siento bastante molesto, pero esas cosas no las escribo.
A mi me gusta contar gansadas, cosas alegres, como el cachondeo de los alcoholímetros aleatorios, el estacazo que se van a dar las bodegas de La Ribera de Duero, el timo de los jamones de pata negra, el despotorro de los Cocineros Creativos, la que se va a liar cuando los camareros ecuatorianos empiecen a montar sus propios negocios, la broma del 2,5% de inflación cuando las judías verdes cuestan mas de mil pelas el kilo en bruto, la invasión de libros de cocina fusilados de ediciones inglesas de los años setenta, en fin, cosas simpáticas, amenas, divertidas.
Vamos, que no sé porqué coño el Proensa dice que mi sección se llame “La última del quera” ¡Joé!

 Para neutralizar la acidez, que no amargura, de este Toque del Quera, en este mismo número publicamos una deliciosa receta que va en consonancia con el tema:  Capón al albariño
Si le interesa leer más sobre este tema, pinche en el icono Buscador (ángulo superior derecho de su pantalla) y escriba la palabra objeto de estudio.

Escrito por el (actualizado: 01/01/2016)