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Leche gallega

 
Publicado en el Diario El Progreso, año 1992.

Quizá resulte un tanto arriesgado tocar desde la perspectiva de la gastronomía, un tema que ha provocado tantos enfrentamientos sociales en nuestra comunidad el pasado año y cuya solución no aparece aún ni mucho menos clara sino más bien turbulenta, pero a lo mejor, ojalá así sea, nuestra humilde aportación sirva para dar alguna pista a la administración con que aminorar el grave problema existente.

Desde la más remota antigüedad, el hombre ha tenido la leche como uno de los más preciados alimentos y concretamente en las distintas regiónes del norte de España, esta ha sido uno de los principales sustentos del pueblo.

Siempre se consideró que aquel nucleo social que dispusiese de este recurso en abundancia no tendría problemas de salud ni padecería las penurias de la hambruna, sin embargo ahora que disponemos del alimento blanco sin tasa y con unas garantías de higiene en su manipulación y comercialización que lo convierten en producto de máxima confianza, resulta que los españoles ya no queremos tomar leche.

Malos hábitos derivados de un ocio insano, modas dietéticas sin sentido, golosinas y refrescos multinacionales que a través de su agresiva publicidad cautivan las mentes mas débiles y en definitiva una escasa cultura alimenticia de nuestro pueblo, son los principales causantes de que este país sea el que menos consumo de leche por habitante tiene en lo que podemos llamar el mundo civilizado (lógicamente los pobres paises tercermundistas están por debajo de nosotros pero precisamente por gusto).

Y yo me pregunto sino resulta inconcebible que si los paises que consumen tres o cuatro veces más leche que nosotros hacen campañas estatales para recomendar su mayor consumo dado su riqueza vitamínica, nosotros que apenas si superamos las tasas de los paises subdesarrollados, no dispongamos tan siquiera de un plan de educación alimenticia que fomente el consumo.

¿Como es posible que sabiendo los graves problemas que se avecinan, no se haga una campaña divulgativa de las ventajas que tiene el consumo de leche de forma habitual?

¿Porqué no se subvenciona una linea de investigación coquinaria para divulgar entre profesionales de hostelería y amas de casa el amplísimo recetario de cocina española que utilizaba este producto en gran parte de sus platos?

¿No sería más positivo triplicar el consumo de leche en detrimento de golosinas, Snakcs y refrescos de dudosa salubridad, que pensar en como sufragar los gastos provocados por las regulaciones de empleo y los gastos sociales derivados de los disturbios que puede provocar el hundimiento del sector?

A lo mejor es que a nadie se le había ocurrido, pero ya que estamos en Europa para tener que competir con multinacionales que producen leche a bajo coste por características orográficas e históricas de su país, quizá también debiésemos ser europeos para facilitar al pueblo la necesaria cultura alimenticia con que mejorar los hábitos y de paso hechar una mano a un sector que tal y como van las cosas, las van a pasar “canutas”.

 Si le interesa leer más sobre este tema, pinche en el icono Buscador (angulo superior derecho de su pantalla) y escriba la palabra objeto de estudio. También le recomendamos consultar en La Simbología de los alimentos

Escrito por el (actualizado: 04/01/2014)