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Galicia en Sobremesa

 
Publicado en el diario El Progreso, año 1993.

Todas las revistas nacionales relacionadas con el mundillo de la gastronomía querían sacar un especial sobre Galicia para celebrar el día del apóstol y el esperado año santo, pero al final, según noticias de primera mano y les aseguro que es cierto puesto que yo mismo he sufrido las graves consecuencias de tal desmadre, la Xunta, o mejor dicho el Xacobeo, después de regalarle los trescientos millones a Julito Iglesias, pues se ha quedado sin cuartos y todos los proyectos de promoción previstos en estos medios, que dicho sea de paso son los que mueven a las más altas esferas de la economía nacional ya que van dirigidas al sector más dinámico en cuanto a gasto en restaurantes se refiere, pues se fueron al traste.

Afortunadamente la revista Sobremesa, la de mayor tirada y de mayor solvencia económica del país, pudo sobreponerse a la ineficacia administrativa de esos señores que han despilfarrado unas cifras escandalosas de millones en hacer una campaña publicitaria destinada a las grandes masas olvidandose de cuidar el turismo de calidad, que el que se deja los cuartos, y el número dedicado a Galicia está ya en los quioscos.
Las formidables fotos de Antonio de Benito invitan a venir a nuestra tierra a disfrutar de una peregrinación gastronómica y paisajística y no como la mascotita de marras que nos estuvo vacilando durante toda la vuelta a España (y lo que le queda), invitando a venir a nuestra región a cicloturistas que con todos mis respetos, tendrán mucho mérito pero a la hostelería gallega le están haciendo un flaco servicio.
Yo propuse hacer una campaña de promoción de las peregrinaciones por vía marítima, una de las más importantes formas de llegar a Galicia desde la antigüedad, y que a través de los numerosos Yatching Clubs que hay en Europa, hubiesen movido a un importantísimo número de turistas de elevado nivel económico que hubiesen dinamizado nuestra tan castigada mariña.
Todavía estoy esperando la respuesta y los empresarios de hostelería reunidos hace un mes en el II Simposio de la Mariña, estaban que bramaban porque estaban teniendo menos reservas que el año pasado.
Pero es que las cosas son así y si proyectos como el de los yates o los distintos propuestos por revistas de alto nivel internacional, quedan en agua de borrajas o van directamente a la basura en beneficio de paridas como la Julito Iglesias, pues lógico que lo único que vaya a venir a Galicia sean cicloturistas de tres al cuarto que encima cuando vean que no hay suficientes albergues gratuitos para peregrinos, van a salir de aquí echando pestes y arruinando aun más el maltrecho panorama turístico gallego.

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