Sindicación de contenidos
Boletín electrónico
Contacto
Mapa web
Logo de FacebookLogo de Google +Logotipo Twitter
 
boton pinteres
Imprime ContenidoEnviar a un Amigo
 

${estadoCorreo}

 

Sopa de arroz sin fibra

Sopa de arroz sin fibra
 
Sopa de arroz sin fibra
Sopa de arroz sin fibra

Octubre 2015

INGREDIENTES 

1 Pechuga de pollo campero
1 Puerro
1 Litro de agua mineral
Salsa de soja Kikkoman
 

Comida 14:h Sopa de arroz: Caldo de pollo colado e incorporar una taza de arroz blanco cocido/Pechuga de pollo a la plancha (sic). Instrucciones de preparación para colonoscopia del Hospital de San Agustín de Avilés, Asturias.

Desde hace algún tiempo albergaba serias dudas acerca de ciertas prácticas de este centro y ya puedo confirmar que detrás de todo esto hay una mente enajenada que disfruta torturando a los pobres pacientes con el único fin de hacer que nuestras vidas sean un poco más miserables.
Desde luego no es muy agradable que te metan un tubo por cierto orificio, ni para quién lo da ni para quién lo recibe, pero todo en este mundo se puede hacer con más o menos sensibilidad y comprensión.
Hace nueve años pasé por este duro trance y, comentando el evento con mi amiga Chiti (no solemos tener conversaciones escatológicas, era simplemente un tema médico), me comentó que también había pasado por ello pero nada que ver con lo que yo contaba le sonaba de su experiencia. Sí había tenido que estar el día anterior a dieta y tomar esos laxantes feroces que te vacían el tracto intestinal, pero nada de cinco días a dieta baja en residuos ni dolores después de la prueba.
El caso es que aquí estoy ante un panorama desolador, pensando en cómo hacerme una sopa de arroz, porque lo que sugiere el panfleto que me facilitaron en el departamento de digestivo no se lo dan ni a un refugiado camboyano.
Miré en el mundo Google y claro, salen miles de sopas de arroz, más de cinco millones, pero si me como una sopa colombiana que le hacía su abuelita a una bloguera de nombre desconocido, con callos, guisantes, patatas..., mañana puedo poner la sala de endoscopias como para llamar a los bomberos. Y tampoco es la cosa.
Busqué y rebusqué, pero nada encontré. Indagué en los numerosos recetarios japoneses de que dispongo, y que si quieres arroz Catalina.
De esta guisa decidí probar suerte por mi cuenta. Comprobé que la zanahoria tiene 1,27% de fibra y que en los protocolos de limpieza de colón de EE.UU. se permite su consumo siempre que esté bien cocida. Buen ingrediente. Luego consulté el puerro y subía un poco al 1,97 %, pero como el realidad no era para comer sino solo para perfumar, pues el residuo de medio puerro en medio litro de caldo resultaba inapreciable. También vi que la salsa de soja tenía un 0,8%, así que un chorrito tampoco se detectaría en un análisis. Para terminar el pollo y tienen 0,0% y el arroz 0,2%, con lo que mi sopa no llegaría ni a 0,1g de fibra, perfecto.

La receta 

La primera que me llevé en toda la cara fue que no tenía zanahorias, pero bueno ¿para qué? No es un sabor típico japonés.
Lo que si hice fue poner a cocer el pollo con el puerro y la salsa de soja muy despacio, sin que hiciera borbotones. Es una forma japonesa para conseguir caldos claros y transparentes, muy elegantes.
Por otro lado cocí el arroz como dice la receta hospitalaria, no porque me interesen sus consejos, sino por no enturbiar mi bonita y transparente sopa.
El montaje fue bien sencillo. En un bol de laca puse un fondo de arroz cocido, encima un poco de pollo (el puerro es de adorno, solo para dar color) y vertí el cado lentamente sobre el pollo para no revolver el arroz. Yo lo veo bonito. Bueno, pues la verdad es que me sorprendió lo buena que estaba. No sé de donde salieron tantos matices pero no digo que no repita, aunque en situaciones menos comprometidas.
Mañana pasará lo que Dios quiera, pero no les informaré.

 

Escrito por el