Care

Es la vanguardia de la vanguardia, rezuma diseño por los cuatro costados, incluyendo el corcho sintético de color negro grafito que combina de maravilla con el resto del decorado y uniformes de ese nuevo local que acaban de abrir en una casa restaurada.

Cuando la moda se entiende en el buen sentido, como es este el caso, todo va bien, porque la etiqueta es estética (guste o no), pero la contra es tan técnica que hasta indican que las barricas fueron en un 60% de roble americano de Kentucky y en el restante 40% en francés de Allier.
Al ver los cara a cara Garnacha/Cabernet y Kentuck/Allier, me dispuse a disfrutar apostando si ganaría la dulzura y calidez de la uva española frente a la picante y verdosa francesa, o la achocolatada madera supertostada francesa sobre el agreste y riojano roble americano. Sorpresa, ni un solo rasgo de los esperados se manifestó. A cambio apareció un complejo conjunto muy bien integrado, con gran estructura, mucho cuerpo, pero nada rasposo, aunque con mucho nervio.
Sí se mostró cerrado, incluso pasadas doce horas, por lo que aventuro que necesita algunos añitos de Botella para ser un gran vino.

Publicado en la guía Asturias gastronómica 2005/2006