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Pepe Contramundi

 

Diciembre 2008

 Hay personas que tenemos una extraña e innata predisposición a recibir motes, casi siempre desagradables, otras absurdos, incluso a veces originales y simpáticos, de modo que he decidido ponerme yo mismo uno elegido por mí: Pepe Contramundi.

 Ya de chiquitín, mi padre me llamaba Pinchapeces. Deduzco que vendría de Pepín, Pin, Pincho, Pinchapeces, porque les juro que aún no había furtiveado ningún salmón.
En el colegio y por otra estúpida degradación, de Iglesias me llamaron Iglú, algo que sin tener el menor carácter peyorativo, a mí me envenenaba y en los recreos me dedicaba a perseguir a guantazos a quién así me llamase, hasta que un día le di una bofetada a un tal Federico Mestre y me respondió con un puñetazo en la boca del estómago que me quitó las ganas de seguir el juego. Pero aquellas rabietas hicieron que el mote triunfase y lo arrastré hasta bien avanzada la juventud.
Cortejando ya con mi primera mujer, en la pandilla de Cangas había varios pepines, por lo que acordamos reformar nuestros nombres y a mí, por razones morfológicas (era delgadito pero una torre, por eso siempre jugué de pilier en los equipos de rugby del colegio y de la facultad), pues me llamaron Pepón, así que en Cangas de Onís, sigo siendo Pepón, el de Solís (lo de Solís eso es otra historia heredada de mi abuelo).
En mi segundo matrimonio, viviendo en Castropol y haciendo gala de esa brillantez y hospitalidad que caracteriza a los habitantes de la ría del Eo, me llamaban “El Gordo” y hace poco años, cuando mi buen amigo y colega, Andrés Proensa, sacó su revista PlanetAVino, pues se le ocurrió llamarme El Quera (si quieren saber lo que significa, vayan al DRAE o pinchen en El Toque del quera ), con lo que ahora los inteligentes lectores de esta publicación, pues envían cartas hablando del cabrón ese del Quera.

¡Ay mísero de mí, y ay, infelice!
Apurar, cielos, pretendo,
ya que me tratáis así
qué delito cometí
contra vosotros naciendo;
aunque si nací, ya entiendo
qué delito he cometido.

Sí don Pedro, yo también sufro así, aunque no sepa escribir soliloquios tan hermosos como los de su Vida es Sueño.
De modo que decidí hacerme ermitaño, asceta, escritor gastronómico, porque un verdadero gastrónomo es un eremita, un ser introvertido que vive un mundo aparte en el que un queso no es un queso, si no un Cabrales falsificado y adulterado con puré de patata y fermentado con penicilium roquefortii.
Busqué mi barril de Diógenes en mi querida Asturias y por fin pude decir aquella frase de San Anastasio Sinaíta: “¡Qué bien se está aquí!, donde todo es resplandeciente, donde está el gozo, la felicidad y la alegría, donde el corazón disfruta de absoluta tranquilidad, serenidad y dulzura,…
Por fin encontré la escondida senda de la que hablaba Fray Luis de León: 

¡Qué descansada vida
la del que huye del mundanal ruido,
y sigue la escondida
senda, por donde han ido
los pocos sabios que en el mundo han sido;

Huí de Madrid, de la empresa, de los negocios, de los comités de empresa, de las letras, de las nóminas, de los saraos y hasta de la familia y amigos.Pintura sobre una escalera

¡Oh monte, oh fuente, oh río,!
¡Oh secreto seguro, deleitoso!
Roto casi el navío,
a vuestro almo reposo
huyo de aqueste mar tempestuoso.

Pero como decía Victor Hugo:

Rien ne me verra plus, je ne verrai plus rien."
On fit donc une fosse, et Caïn dit : "C'est bien !"
Puis il descendit seul sous cette voûte sombre.
Quand il se fut assis sur une chaise dans l'ombre
Et que l'on eut sur son front fermé le souterrain,
L'oeil était dans la tombe et regardait Caïn.

He huido del mundanal ruido, me he encerado en un barril a la deriva, pero “El ojo está en la tumba y me mira”.
Yo no maté a mi hermano, al menos que recuerde, pero llevo el estigma, por eso soy Pepe Contramundi.

Argumento a guisa de justificación de este latazo 

El año 2009 empieza con la palabra Crisis, pero, como decía Supertramp en el 75: “Crisis? what crisis?”.
¿Es crisis no poder comprarle al nene un Audi R8, quedarse sin vacaciones de nieve en Baqueira o ver como las letras de ese chalet en la sierra, comprado contando con que tocase el cuponazo, se nos vengas encima?
Crisis es lo que hay en Islandia, donde los tres grandes bancos han quebrado, el gobierno está en banca rota y va a doblar los impuestos, los fondos de pensiones se han ido al garete, las pensiones se han bajado al 50%, todos los proyectos subvencionados han sido cancelados, hasta las emisoras de radio locales han tenido que cerrar por no recibir fondos, el valor del dinero ha caído un 50%, los productos, como son todos importados, se han encarecido un 80%. Eso sí es crisis.
¿Hasta cuando en este país vamos seguir contando mentiras?
Me parece grotesco que, pasada la oligarquía secular que ha gobernado España desde el triunfo de los Reyes Católicos, sigamos hablando con rigor histórico de falacias grotescas como la leyenda de La Reconquista, la invasión napoleónica o la infalibilidad del Papa.
Siempre he sido anarquista e iconoclasta, pero antes de destrozar un icono, me he informado sobre cual era su significado. Hoy los niños destrozan cajeros, tiendas, coches, y mobiliario público, porque en Grecia un policía le pegó un tiro a un estudiante que le estaba agrediendo ¿Es esto anarquía? No, por favor, tajantemente no.
Estos niños mimados, que llevan un iPhone y un iPod, pagado por su padre, a quién le están quemando el coche y la tienda,son unos cretinos, unos bárbaros, unos canallas, gentuza, basura, alimañas. No anarquistas.
Los anarquistas sabemos que nuestra libertad termina donde empieza la del prójimo.
Yo me considero un buen cristiano, a pesar de lo que los católicos españoles opinan de los masones, y no me gusta el signo de la cruz porque representa el sufrimiento, la injusticia, la crueldad. ¿Conocen ustedes a alguien que venere la horca, la guillotina o la silla eléctrica?
Amo a Dios nuestro señor y a su hijo Jesús, modelo de vida para todos los hombres, pero le quiero ver vivo, enseñando su doctrina, curando enfermos y consolando viudas, no descoyuntado y medio destripado en un madero por haber defendido la libertad y la fraternidad.
Soy iconoclasta, pero no he roto ningún crucifijo, de hecho me arrodillo al pasar delante de él y me persigno en señal de respeto hacia quién padeció la tortura por nuestra salvación.
Pero no le beso el anillo al obispo de una Iglesia que no ha pedido perdón por la matanza de millones musulmanes en las cruzadas de Jerusalén, ni por la matanza de cientos de miles buenos cristianos en la persecución cátara solo porque estos querían seguir el mandato de Cristo del voto pobreza, ni por bendecir los cañones de Hitler, Musolini, y Franco, ni por gastarse quinientos millones de dólares en ocultar los casos de pedofília de sus jerarcas mientras que el Papa condena la homosexualidad y sus misioneros y los curas rurales apenas si pueden comer con lo que el Vaticano les paga por hacer una gran labor social.  Quizás en sus biblias no exista el Evangelio de San Juan donde decía: " No puedes amar a Dios y hacer daño al hombre".
¿No sería ya hora de poner en práctica aquel concepto que Krause bautizó como "Patriotismo planetario"? A finales del XVIII, principios del XIX, hablar de suprimir fronteras era una utopía, pero hoy, que ya vemos las catástrofes por TV en tiempo real a miles de kilómetros de distancia, que sabemos que la deforestación de la Amazonia causa estragos climáticos en Europa, que nadie cree en reyes no coronas, que todos los países civilizados admiten todo tipo de credos y religiones ¿No podríamos aceptar ya el pensamiento de Krause?
Yo no besaré ningún anillo, pero tampoco incendiaré ninguna iglesia. Quienes las incendiaron en el 36 no eran anarquistas, si no campesinos analfabetos víctimas de la crueldad de aquellos curas que gobernaban con tiranía y hasta sadismo.
Tampoco destripo a jueces corruptos, aunque eso sí que me apetecería, poder operarles del colon sigmoide con mi alfanje y sin anestesia, sobre todo a esos del CGPJ que justifican y legalizan los crímenes cometidos por sus coleguillas, si acaso con mil eurillos de multa. Ni vuelo bancos, a pesar de sufrir en mis carnes el escándalo de esta llamada crisis, provocada por ellos gratuitamente por el simple deseo de mostrar su poder, chantajeando al gobierno. Aunque este les haya entregado 100.000 millones de euros, mientras el señor Botín & Cº, presumen de haber ganado 6.800 millones más de euros que en el anterior ejercicio, que ya fue record, yo no incendiaré ningún banco (si pudiese incendiaría la sede donde se reúnen los grades capitostes, pero esos bunkers están blindados).Pintura sobre un Belén
Los políticos nos tapan los ojos con tinta de calamar diciendo que si la memoria histórica puede herir sensibilidades y que es mejor dejar enterrados a los muertos, cuando el último tirano murió en su cama y hasta dejó a su sucesor como Jefe del Estado y  todos lo aceptamos sin pestañear.
¿Memoria histórica? Quién tiene memoria histórica en este país que confunde la invasión napoleónica, en la que no se pegó ni un tiro porque fue una súplica de los liberales españoles que pidieron ayuda a Francia para mandar a la mierda a aquel maricón llamado Carlos IV, con la oleada de asesinatos y saqueos que llevaron a cabo los Cien  Mil Hijos de San Luís, mercenarios contratados por aquel otro canalla, Fernando VII, que juró la constitución para llegar al trono y cuando fue coronado, se limpió el culo con ella y hasta reinstauró la Inquisición.
¿Memoria histórica? Acaso no habría que recordar que todo el problema vasco viene provocado por las artimañas que preparó este degenerado y al que encima los curas apodaron “El Deseado”.
O más cerca aún, porque nuestro amado Jefe del Estado, fue instaurado por el anterior dictador a guisa de heredero suyo y aquí sigue cazando y paseando en yates de lujo por Mallorca (y más cosas que todos sabemos, pero que no se pueden decir ni en Internet).

  • Oiga, interviene mi censor saurio que hacía rato que escrutaba por encima de mi hombo, ¿no esto es una página de gastronomía?
  • Si señor, obviamente.
  • Entonces porqué nos está usted aburriendo con estas sandeces y estos poemitas tan cursis.
  • ¿Le parece bien que diga que me indigna que unos tomates por los que se le pagan 30 céntimos al agricultor, en El Corte Inglés cobren más de mil pesetas y que ninguna publicación convencional haga jamás una crítica contra una gran superficie? Eso sí, meten unos anuncios carísimos.
  • Pues váyase a comprarlos Murcia. ¿Acaso es usted tomatero?
  • No señor, pero por ejemplo, a mí,  solo por dejarme exponer mis libros, estos megapolios me exigen un 50% del PVP (si no se venden, los devuelven, estén como estén), mientras que quienes los hemos currado, editor, autor, diseñador, impresor, encuadernador, almacenista, distribuidor, etc., apenas si podemos cubrir los honorarios de nuestro trabajo.
  • Es verdad, ya me preguntaba yo porqué nadie criticaba lo mala que es la fruta del Hipercor. Y usted ¿no tiene miedo a que tomen represalias?
  • No porque yo no me bajo los pantalones por una publicidad, a menos que insistan, claro. Además yo soy Pepe Contramundi.Usted lo que es, es un imbécil y yo me voy a comer una pizza, porque no le aguanto más majaderías. A paseo.
  • Eso, vaya usted a papar moscas.

¡Ay mísero de mí, y ay, infelice!

Escrito por el (actualizado: 22/05/2020)